Tartaletas rellenas de crema inglesa de chocolate

Me encantan las tartaletas; creo que es un postre estupendo y que dan muchísimo juego ya que permiten multitud de rellenos. Además, creo que quedan muy bonitas como postre individual ¿no os parece? Hace unos días decidí prepararlas en casa. En un primer momento había pensado rellenarlas de mousse de chocolate, como hago habitualmente, pero entonces recordé una crema inglesa de chocolate que había visto en la receta del libro de Cordon Bleu y me decidí ha preprarar ese relleno; sin duda fue un acierto. Resulta una crema con una textura estupenda y un sabor delicioso. A mi sobrina, que es la catadora oficial de los postres chocolateados le encantaron y os aseguro que eso es una garantía jajaja. espero que os gusten.

Ingredientes:

Para la masa de tartaleta:

Para la crema inglesa de chocolate:

• 2 yemas de huevo.
• 40 gramos de azúcar.
• 130 mililitros de leche.
• 120 mililitros de nata.
• 200 gramos de chocolate de cobertura.

Comenzamos preparando las tartaletas. Para ello mezclamos la harina con el azúcar y la pizca de sal. Añadimos la mantequilla cortada a daditos y amasamos con los dedos hasta obtener una masa grumosa.

Añadimos las yemas de huevo y, si fuese necesario, el agua.

Amasamos bien y dejamos reposar mínimo una hora en la nevera. Pasado ese tiempo la estiramos bien finita.

Recubrimos los moldes y horneamos a 200º hasta que esté doradita. Reservamos.

Mientras tanto preparamos la crema inglesa de chocolate. Comenzamos poniendo en un cazo al fuego la leche y la nata. Mientras llevamos a ebullición, batimos las yemas con el azúcar hasta que blanquee.

Una vez que le leche ha hervido la mezclamos en forma de hilo y sin dejar de remover con las yemas que tenemos mezcladas con el azúcar y llevamos de nuevo la mezcla al fuego.

Cuando la crema ha espesado la retiramos del fuego y vertemos sobre ella el chocolate, removiendo hasta que se derrita por completo.

Vertemos la crema de chocolate sobre las tartaletas y dejamos enfriar.

Como veis yo las decoré con el bonito ganchillo comestible que realicé gracias al tapete de Silikomart, con el que hace unas semanas también decoré estas galletitas.