Como sabéis sigo recuperándome de mi operación de tibia. Ya voy algo mejor aunque sigo sin poder estar en otra posición que no sea acostada por lo que de momento la cocina sigue siendo terreno vedado para mi. Suerte que mi hija Rebeca sigue encargándose de ella y no ha querido que pasásemos esta Santa Santa sin disfrutar de las tradicionales torrijas. En esta ocasión las ha preparado siguiendo la receta de la famosa pastelería madrileña Moulin Chocolat. Una torrijas realmente deliciosas que tienen la peculiaridad de estar bañadas, en lugar de en leche, en una crema inglesa cruda que se cocina al freir la propia torrija en el aceite bien caliente. Os aseguro que el resultado es sorprendente y bien merece la pena prepararlas aunque sean un poquito más laboriosas que las tradicionales. Además, en esta ocasión ha preparado también un pan brioche enriquecido con mantequilla y huevos que aporta un sabor y una textura fantástica. Fuente de la receta Moulin Chocolat y El invitado de invierno.
Ingredientes:
Una barra de 600 gramos de pan brioche (pronto daré la receta).
400 mililitros de leche entera.
200 mililitros de nata.
6 yemas.
100 gramos de azúcar.
Una cucharadita de Maizena.
Una cucharada de vainilla en pasta o una vaina de vainilla.
Huevos para rebozar.
Aceite de oliva virgen extra suave para freir.
Azúcar y canela para rebozar.
Elaboración:
La noche de antes de preparar nuestras torrijas cortamos las rebanadas de pan bien gorditas. Las colocamos sobre una rejilla y las dejamos, sin cubrir con nada. El objetivo es que resequen y así empapen mejor la crema.
Preparamos nuestra crema. Para ello colocamos en un bol la leche, la nata, el azúcar, la vainilla y las yemas y mezclamos bien. Tomamos un par de cucharadas de la mezcla y disolvemos en ellas la maizena, incorporando de nuevo al recipiente. Mezclamos bien. En una fuente colocamos bien extendidas las rebanadas de pan y vertemos sobre ellas nuestra crema inglesa cruda. Debemos dejarlo hasta que la empape toda, más o menos una hora aunque esto dependerá del tipo de pan que uséis.
Seguidamente pasamos las rebanadas de pan por huevo bien batido.
Freímos en aceite bien caliente hasta que nuestra torrija se quede doradita.
Finalmente se reboza de forma generosa en azúcar y canela y ya solo nos queda disfrutar. Nos olvidamos de hacer la foto del corte y me ha dado mucha rabia porque el interior es blandito y muy muy cremoso.
Hola guapa poco a poco te iras poniendo bien , te deseo una pronta recuperacion , que torrijas mas rica me gusta como la ha echo tu hija , besitos guapa para las dos
ResponderEliminarUnas torrijas deliciosas, demasiado golosas, pero una o dos no hacen daño a nadie.
ResponderEliminarEspero que te recuperes pronto y bien, lo más importante es tener paciencia.
Un beso.
María anres de nada recuperate pronto y descansa. Que maravilla de hija tienes, la mía la cocina ni verla jeje. Que delicia de torrijas, nunca las he comido bañadas en esta crema y me han encantado y encima con un pan tan rico, vamos para babear, espero la receta del pan con ansia.....Bess
ResponderEliminarHola, qué pintaza tienen, se ven deliciosas y de las mejores. Sin duda alguna, son para disfrutarlas.
ResponderEliminarEsoero que te encuentres mejor y que en nada estás recuperada. Cuídate mucho preciosa, un beso muy grande!!
Qué maravilla esta versión de las torrijas, deben estar divinas. Espero que te recuperes muy pronto, un beso enorme.
ResponderEliminarEstas me las hare en navidad, creo que se lo merecen porque tienen pinta de ser de fiestas, ademas llevo haciendo torrijas desde carnavales, en esta semana santa, las hice tres veces, tengo a mis niños aqui claro, porque sino yo no las haria tantas veces, tienes una hija que sale a la madre que la pario, artista en la cocina y buena persona, como tu mi querida Maria que vales mucho, me alegro que vayas a mejor, un fuerte abrazo tesoro, y dale otro a tu hija por la receta
ResponderEliminarTú sigue recuperándote con tranquilidad que está claro que tu hija es un tesoro y tan artista con el dulcerío como tú. Estas torrijas tienen que estar muy ricas, no las conocía.
ResponderEliminarBesos.
María me alegro de que estés un poquito mejor aunque aún tengas que estar tumbada todo el rato. En tu hija Rebeca tienes una digna sucesora ¡menudas manos tiene para la repostería! Estas torrijas están espectaculares y aunque no haya foto del corte se nota que tienen que ser una locura ¡receta que os copio!
ResponderEliminar¡Besos mil!
¡Felicitamos pues a Rebeca!, que ha heredado también de su madre este gusto maravilloso para hacer postres de toda la vida....¡la niña es digna de su madre!, ya te digo...jeje.....Me comía una de estas ahora mismo mi querida María...sabes que te quiero y me acuerdo de tí todos los días.
ResponderEliminarMIL BESOS PARA LAS DOS
Marialuisaa
Mi querida Maria cuidate mucho y reponte bien, veo que tu hija ha heredado tu arte en la cocina las torrijas le han quedado de relujo no lo siguiente y no dudo lo mas minimo que esten para ponerles un piso u dos.
ResponderEliminarCasi me alegro de que no haya echo la foto del corte asi no me llegan las babas hasta las rodillas jis jis.
Bicos mil y feliz semana potita miaaaaa.
En primer lugar espero que te recuperes lo antes posible.
ResponderEliminarEn cuanto a estas torrijas, que no conocía, me parecen una verdadera delicia.
Saludos
Estas torrijas están para derretirse, tan solo ver los ingredientes lo dice todo.
ResponderEliminarEspero que te vayas recuperando bien, un abrazo.
Hola Maria! te cuidan como te mereces. Que suerte que a tu hija le guste la cocina, para deleitarte con este manjar.
ResponderEliminarCuidate.
Un beso de maricacharros.
Esas torrijas se ven maravillosas, ojala y pudiera llevarme una!
ResponderEliminarBs
Mi madre!!! qué torrijas tan exquisitas, tienen una pinta que entran por los ojos, eso si, la dieta y ellas no son compatibles.
ResponderEliminarBesitos guapa
Qué buenísimas que se ven!!! Cuídate mucho. Bss.
ResponderEliminarHola preciosa! como últimamente no dispongo de mucho tiempo para dedicarle al blog, no tenía ni idea que estabas malita, lo lamento mucho. Tómalo con calma y deja que te mimen, que ya veo que lo hacen estupendamente, tienes una hija maravillosa, a salido a la madre.
ResponderEliminarGracias por compartir las torrijas, con esa crema tienen que estar fabulosas!! un día de estos probare a hacerlas. Mucho animó y un fuerte abrazo querida amiga
Donde veo una torrija allí que acudo y es que me vuelvo loca por una de ellas, éste año la he hecho en dos ocasiones y miedo me da hacerlas más veces, me las como todas ejjeje.
ResponderEliminarTe quedaron impresionantes, que belleza de fotos. Besosss
Viviendo en Madrid y no sabía de estas torrijas, vaya...¡qué riquísimas deben estar! además con el pan brioche casero ya debe ser la monda. Felicita a tu hija y recupérate pronto, muchos besos!!
ResponderEliminarSemplicemente meraviglioso questo dolce cara :p
ResponderEliminarUn abbraccio a presto <3
Hola María, llevo un tiempo desaparecida de internet y la verdad no sabía nada de tu operación, por lo que leo todo a salido bien, pero ahora toca recuperarse y para eso se necesita tiempo y paciencía, eso va lento, no desesperes.
ResponderEliminarSobre tu receta que te voy a decir, si es que las fotos lo dicen todo, esas torrijas tienen que estar de fábula, tienen una pinta fantástica, como siempre, un placer pasar por tu cocina y ver cosas tan ricas.
Un beso y que te recuperes pronto.