Toda mi vida ha transcurrido entre pan, y lo digo en el sentido más literal de la palabra. El portón de mi casa hacía las veces de almacén de harinas, lo que me obligaba a atravesar el despacho de la panadería cada vez que quería salir a la calle. El obrador de "Mariquita la del pan" fue, durante toda mi infancia y también durante la de mi hija, el comedor familiar, pues ya se sabe que para los pequeños negocios, más antes que ahora, no había horarios y eso obligaba a las familias a convertir en hogar su lugar de trabajo. De niña no me gustaba que mis zapatos estuviesen siempre llenos de harina, eso era lo único malo de vivir encima de la panadería familiar; sin embargo, todo lo demás era maravilloso: siempre podía disfrutar del aroma y, más aún, del sabor a pan recién horneado. Podía pasarme el día de puntillas delante de la gran artesa viendo como se trabajaban las masas, como se rellenaban las empanadillas o como se cortaban los pastelillos. Si tenía frío me colocaba una silla delante del horno moruno y disfrutaba del espectáculo de ver a mi padre manejando la pala con maestría... Si estaba aburrida no había nada mejor que ver a mi madre hacer los cortes en el pan antes de cocer. Supongo que por todo esto o, tal vez, porque conozco los sacrificios que conlleva el mantener un establecimiento que abrió sus puertas en 1915 y que aún hoy, cuatro generaciones después, continúa en el mismo lugar amo y respeto la profesión de panadero. Hoy me vais a permitir que este nuevo reto del Desafío en la cocina se lo dedique precisamente a esas cuatro panaderos: Mateo Pérez Gómez, mi abuelo, fundador de este noble negocio de venta de pan y el primero en usar la balanza que hoy decora mis fotos; José María Pérez Rodríguez, mi padre; José Mateo Pérez Pallarés, mi hermano; y Mateo Pérez Pallarés, mi sobrino. Espero que os guste.
Ingredientes:
Para la creciente:
- 250 gramos de harina.
- 175 gramos de agua templada.
- 5 gramos da sal.
- 8 gramos de levadura prensada.
Para el pan:
- Toda la creciente anterior (que debe haber reposada un mínimo de 48 horas).
- 3 litros de agua templada.
- 5 kilos de harina.
- 25 gramos de levadura prensada.
- Dos cucharadas soperas de sal.
Elaboración:
Comenzamos comenzando la creciente. Para ello colocamos en un bol el agua templada, la levadura prensada desmigada y la sal. Vamos echando la harina y amasamos. Una vez lista la dejamos reposar un mínimo de 48 horas en un lugar templado.
Para elaborar el pan seguimos los siguientes pasos: Sobre la creciente que teníamos reservada desmigamos la levadura y echamos la sal. Vertemos entonces dos vasos de agua templada (estos vasos de agua los descontaremos después de los tres litros que utilicemos para amasar) y batimos bien con las manos.
En un barreño de gran tamaño ponemos el agua templada restante y vertemos en él la preparación anterior (creciente, agua, sal y levadura).
Añadimos después la harina poco a poco e inicialmente vamos batiendo.
Cuando la masa comience a unirse la colocamos en una superficie enharinada y, ahora sí, amasamos hasta lograr integrar toda la harina.
Una vez que nuestra masa esté bien amasada y que presente un aspecto liso y no pegajoso lo dejamos reposar sobre una media hora. Transcurrido ese tiempo heñimos o damos forma a las piezas de pan y de nuevo dejamos reposar hasta que haya levado.
Una vez que el pan ha levado le realizamos los cortes con una cuchilla bien afilada mojada en agua. Yo en este paso conté con la ayuda de mi madre que es la experta en los cortes del pan.
Finalmente horneamos nuestro pan a 200 grados. El tiempo, como siempre, dependerá del tipo de horno.
Mirad un poquito más de cerca la balanza. No me imagino la de panes que se habrán pesado en ella desde 1915.
Y aquí están mis abuelos, Mateo Pérez Gómez y María Rodríguez Muñoz, fundadores en 1915 de la panadería "Mariquita la del pan".
Si quieres ver el resto de panes que completan el Desafío pulsa AQUÍ.
Unos panes espectaculares y una entrada preciosa llena de sentimientos. Las fotos son fantasticas!!!
ResponderEliminarBesitos
Ani
Hola bonita no hay nada como lo casero los panes espectaculares, que inchaditos se ven además su sabor seguro delicioso, y la balanza, es ya una verdadera reliquia.
ResponderEliminarY la colección de panes que interesante entrada difícil decidirme por que todos se ven ricos.
Feliz domingo...
No hay cosa que más me guste que hacer pan en casa. El tuyo ha quedado maravilloso!
ResponderEliminarBesos!
María, me encanta tu entrada, con el cariño que la has redactado y el homenaje a tus abuelos.....FELICIDADES.
ResponderEliminarLa foto con la balanza de fondo me ha encantado
un beso compi
María, me ha gustado especialmente la entrada de hoy...
ResponderEliminarEl cariño que le has dado, estos panes tan fantásticos y el paso a paso perfecto, de 10!
Un besote,
Aurélie
Es un oficio que me encanta!, aunque muy sacrificado. Me ha encantado tu entrada! El pan Buenisimo. besitos
ResponderEliminarsimplemente ESPECTACULAR!, y que bonita entrada, un bikiño,!!
ResponderEliminarMaría que dedicatoria más entrañable, y que maravillosa infancia y recuerdos más bonitos. He disfrutado leyendo cada palabra parecía como si lo estuviese viendo. Que te puedo decir del pan, que es todo un lujazo que nos hayas presentado esta receta. Yo adoro hacer el pan en casa, aunque todavía me falta mucha experiencia y contigo aprendo un montón. Muchísimas gracias por compartir tanta sabiduría. Me guardo la receta como oro en paño. Que tengas un feliz domingo. Un biquiño muy grande.
ResponderEliminarMiro atentamente la balanza, miro atentamente el pan , las manos de tu madre y la foto de tua abuelos.
ResponderEliminarTodo muy muy grande María; les has hecho un momenaje muy hermoso y me has hecho disfrutar con él.Gracias.
Que bonito, que entrada y panes mas entrañables. Besotes
ResponderEliminarQue maravilla, me encantan tus panes y las fotos son preciosas ;)
ResponderEliminarEstos son panes de lujo que pinta tan buena y que pocos venden hoy día de esos besos
ResponderEliminarOh! que preciosidad de post!!! hasta los aromas me llegan, y crecer en una panadería, llevar en la sangre la ilusión de hacer pan, las ganas y sobre todo la historia, que bueno!! fascinada con los panes que nos traes y con la historia familiar, me encanta!
ResponderEliminarFeliz domingo, guapa!!
¡Qué manos tienes! Se ve que hay historia detrás de este pan tan maravilloso que elaboras. Tiene un aspecto buenísimo.
ResponderEliminarBesos.
que bonita entrada María, muy emotiva sin duda!! yo, que soy conciente de lo bien que funciona vuestro horno familiar y doy fé de ello, se que no podía haber mejor receta para tí que esta porque siempre has vivido rodeada de sus aromas...la historia de tener siempre los zapatos llenos de harina me ha conmovido, una anecdota preciosa!! ni que decir que el pan se sale de la pantalla, y yo sin dudarlo ni un segundo me quedo con tu receta ante todas por el cariño que desprende!! un besico
ResponderEliminarMi marido ha leido tu entrada conmigo,él vivió en un cortijo alejado donde no tenían mas remedio que hacer pan,dice que él que has hecho es el verdadero,le digo 3 días haciendo el pan, y él dice que ellos lo hacían igual,que el pan,necesita esos levados,no has encantado y lo pongo en favoritos.....besitos
ResponderEliminarQue panes por Dios!!!
ResponderEliminarUna maravilla de post y de historia.
Un beso
Que lindo post Maria... me encanta como nos acercas a tu historia de vida: Gracias por compartirla con todos nosotros.
ResponderEliminarEl pan tiene una pinta fascinante y que te pudeo decir de las fotos... muy lindas con esa balanza de fondo.
Besos y abrazos para ti. Que pases un feliz domingo
Que ricoooos!!! Madre mia!!
ResponderEliminarHola María!!! Que maravilla de historia, me ha encantado leerla y la balanza es impresionantemente antigua, pero seguro que cada vez que la miras te recordará etapas de tu vida.
ResponderEliminarEl pan te ha quedado impresionante, tu también has heredado la maña de hacerlos, bssss.
Pan de toda la vida, qué bueno! y qué entrañables recuerdos...
ResponderEliminarGenial! y encima con historia!
ResponderEliminarTe ha quedado de panadero.
ResponderEliminarSaludos
Hola María.
ResponderEliminarUn homenaje precioso a tu familia, con todo el cariño que les tienes, y con todo el respecto que se merecen, muy entrañable. Y qué decirte de los panes, con la tradición que hay en tu casa tú has heredado esa destreza para amasar, porque manejar 5 kilos de harina no es para nada sencillo. Además con la ayuda de tu madre os han quedado fabulosos. Y lo mejor será disfrutar del olor y del sabor incomparable del pan casero. Están fantásticos.
Un saludo.
Maria qué entrada mas llena de emoción...... . Qué bonita balanza, una muy parecida había en la tienda dónde iba con mi mamá a comprar cuando era pequeñina, me la has hecho recordar.
ResponderEliminarA mi me apasiona el tema pan. Si me hubiera criado en una panaderia sería la mujer mas feliz de la tierra, me parece uno de los oficios mas gratos pero poco reconocido.
Oímos hablar siempre de los grandes chef, pero de los panaderos con lo importante que es el pan, a cuantos conocemos ?...Realmente a dos o tres , es injusto verdad ?...
Asi pues me uno con el mayor respeto y admiración a este homenaje que le has hecho a los tuyos y que tan merecido es.
Los panes sobra decir que están espectacular y ya me imagino lo bien que saben.
Un abrazo enorme Maria querida.
María nadie mejor que tu para enseñarnos a hacer un buen pan. Un alimento básico pero que hay gente que hace con tanto mimo que de básico se convierte en todo un delicatesen. Lo que daría por poder probar un cacho.......
ResponderEliminarFeliz domingo querida amiga
Ains chica que cosa mas ricaaaa
ResponderEliminarLos panes son increíbles, que buenos!! Lo que mas me ha gustado ha sido la bonita historia familiar que nos has contado!
ResponderEliminarbesitos
veramente un pane splendido Maria ! Buona domenica cara amica !
ResponderEliminarMadre mía María que de años tiene la balanza, ya mismo un siglo.
ResponderEliminarPues normal que se la dediques a ellos, te habrá venido muchas cosas buenas a la memoria.
Me ha encantado tu pan, casero al 100x100 y trabajado con las manos.
Felicidades
Este pan es una obra de arte,tengo que probar haber si me sale como ati,porque tiene una pinta para comerselo.
ResponderEliminarSaludos
Un autentico lujo de entrada!! que envidia haber tenido la oportunidad de poder aprender del pan tan de cerca!! desde luego que se merecen y con mucho el Desafio!!
ResponderEliminarlaura
Preciosa entrada María, que compartas con nosotros estos recuerdos me encanta. Además de que se notan las manos experta a la hora de hacer el pan, porque realmente parace recién salidito de la panadería
ResponderEliminarBEsitos
q lindos tus abus... ostras con la balanza chiquilla q preciosidad !!! oye q panazo .. virgen santa es perfecto y q color !!! amiga q lujazo de pan. Muakssss
ResponderEliminarHola guapa.
ResponderEliminarNo se cual me ha gustado mas, si los panes o tu historia sobre ellos.
Que delicia niña ; y como me recuerdas a los que mi madre hacia para el consumo de la casa .
Es una verdadera delicia verlo y no te digo nada comerlos asi de recientes.
Enhorabuena por esta publicacion.
Qué historia más bonita y bien contada, los panes son espectaculares con nota, la foto me ha encantado de verdad.Besos.
ResponderEliminarHola MAESTRA, es lo único que se me ocurre al ver estos panes ¡que gozada! amiga mía, hoy estoy disfrutando mucho, porque me encanta el pan y hoy es un día para disfrutar de este alimento maravilloso y tan unido a nuestras vidas desde la infancia. También he disfrutado mucho con tu entrada, bello homenaje a tus familiares y la balanza una autentica joya. Y un saludo a la cortadora oficial del pan, que ha echo que quedran tan bonitos.
ResponderEliminarUn bico para las dos
Estupenda entrada María! me ha dado mucho gusto leerla y viajar con la mente a esa panadería y sentir este estupendo aroma a pan recién horneado! Te han quedado geniales!!! Lo has hecho estupendamente, como una buena heredera de esa magnífica tradición!
ResponderEliminarBESOTE
Hola María! Que bonita entrada!
ResponderEliminarQue entrañable! Un abrazo fuerte para tu madre...que ya me imagino lo que es toda una vida dedicada a la elaboración y venta de pan...
Que bonito homenaje a esas fabulosas cuatro generaciones de tu familia...y las que vendrán.
Y con tu permiso me llevo la receta...que te prometo la preparé y lo saborearemos gracias a ti!! Mis niñas ya te conocen...así que rebautizaremos como el pan de María!!
Todo Un regalo este pan que se ve...umh! El corte lo dice todo y las fotos de catálogo!!
Salu2 corazón.
Cocinandovoyrecetandovengo.
Mi querida amiga como no iba ser menos que te saliera ese pan tan expectacular, con todo la sabiduria de panaderos en tu casa y las manos de tu madre dandole el toque final tan perfecto. Esas si que son manos artesanas, besiños para las dos de esta gallega.
ResponderEliminarNada más que por ver la manera de amasar, se nota que siempre has vivido rodeada de pan, no todo el mundo sabe amasar, es todo un arte y tu tienes ese arte, nada más ver los resultados.
ResponderEliminarBesos. Lola
una entrada preciosa! y el pan fantastico! bicos
ResponderEliminarQue maravilla Maria, vivir encima de una panaderia debe ser una gozada, mi abuelo por parte de madre tambien era panadero, y ahora que recuerdo (su hermano) el tio de mi madre tenia (y aun tienen los nietos) una panaderia en San Fernando, panaderia el laurel se llama, debe ser por eso que me gusta tanto hacer pan.
ResponderEliminarUn beso guapisima
Una entrada preciosa, llena de cariño hacia tu familia y a ese oficio maravillos que últimamente debe estar viviendo momentos difíciles con tanto pan industrializado que se vende en cualquier lado.
ResponderEliminarY qué maravilla haber crecido en una panadería con ese aroma llenándolo todo.
Ah...y dile a tu madre que si me enseña a hacer los cortes, que nunca me salen bien.
Un besazo.
Hola María!!!! que entrada más bonita y emotiva y de los panes ni que decir son espectaculares...
ResponderEliminarbesets
Unos panes exquisitos, hechos sin duda con mucho cariño por lo que nos cuentas. Preciosa entrada. Un saludo.
ResponderEliminarQué entrada tan emotiva mi querida María. Mi familia también está llena de panaderos, cuatro de los siete hermanos de mi madre lo son, así que yo, de una manera no tan directa como tú, también he vivido ese ambiente panaderil cuando pasaba los días en casa de mis primos. Ese olor a masa y a pan recién horneado lo tengo presente casi a diario, porque en casa también casi a diario horneo pan. Pero el pan que se hace en casa, por muy bueno que esté y que salga no puede compararse con aquellos hornos. Recuerdo cómo mis tios iban cambiando el pan de sitio dentro del horno con una enorme pala de madera. Me parecia un trabajo precioso y fíjate que ninguno de mis primos quiso dedicarse a ello, por lo que las panaderías han pasado actualmente a terceras manos y me da pena cada vez que lo pienso. He disfrutado muchísimo de tu entrada y de tu pan, sin duda espectacular, y del que sin duda, tu abuelo, y padre, hermano y sobrino estarán orgullosísimos. Un beso enorme.
ResponderEliminarMe encanta la entrada de hoy y un pan de los más bueno, el de toda la vida.
ResponderEliminarBesitos guapa
Qué buen himenaje a esa cuatro generaciones de panaderos. Un oficio muy importante en nuestras vidas y me encanta cómo cuentas la historia de tu vida ligada a la panadería.
ResponderEliminarLos panes, evidentemente, son impresionantes. Imposible mejorarlos. Y qué lujo, además, contar con la ayuda de tu madre.
Un beso guapa
Me quede sin palabras al ver este pan!!!menuda gozada de hogazas y barras y que hojuelos es que la boca se me llena de agua solo de pensar lo que haria con un buen trozo de una de las piezas uummmm...Besos
ResponderEliminarA juzgar por lo que te han enseñado y has aprendido, "tus panaderos" son buenos, muy buenos. Y los panes son de exhibición, están fuera de concurso. Enhorabuena Maria. Besos,
ResponderEliminarPilar
Maria ,menudo homenaje que le hiciste a tu familia ,te quedaron unos panes perfectos ,pero claro juegas con ventaja eh? jaja,es broma
ResponderEliminarLa verdad es que tienes unas manos extraordinarias con todo lo que haces ,asi que el pan no podia ser menos
A proposito ,tengo una balanza muy parecida a esta tuya ,verdad que son preciosas ?
besinos guapa
Nuestra infancia nos marca en cierto modo nuestra vida con sus olores y sus sabores, tu entrada muy bonita y entrañable, felicidades por tus panes todo un lujo y de los de verdad, de toda la vida que ganas de poder probar un trocito. saludos. :-))
ResponderEliminarHas sido afortunada de vivir mano a mano en la elaboración del pan, no me extraña que te haya quedado perfecto y delicioso, además elaborado con las manos como debe de ser.
ResponderEliminarMe encanta que se lo hayas dedicado a tus abuelos.
Besos.
Qué maravilla de pan, y cuántos recuerdos y anécdotas tendrás de esa panadería tan estupenda.
ResponderEliminarY cuánto habrás aprendido allí, viendo a tu familia amasar y hornear el pan.
El pan es una de mis asignaturas pendientes en la cocina, así que admiro especialmente a quienes se dedican a la panadería.
Me ha gustado mucho tu entrada.
Un beso muy grande, guapa.
María qué homenaje tan estupendo a tu familia!!! Te doy la enhorabuena porque te ha quedado precioso. He leído atentamente la entrada y me doy cuenta del profundo amor que se desprende de tus palabras...
ResponderEliminarTe quedaron unas magníficas hogazas, has tenido los mejores maestros!!!
El olor increible de pan recién horneado debe circular por tus venas, qué maravilla!!!
Me encanta el nombre: " Mariquita la del pan"...Sería un nombre maravilloso y tierno para un blog como el tuyo. Me ha sorprendido mucho y no sabes lo tierno y bonito que me ha parecido...
María cariño, poquito me ha faltado para estar ahí contigo mirando la masa, al calor del horno, y oliendo esos maravillosos panes. Una entrada preciosa y entrañable y que panes mas ricos y bonitos. Unos recuerdos de los que no se olvidan nunca y la balanza una joya. Muchos besitos.
ResponderEliminarQue bonita entrada has preparado, y el pan delicioso, ahora menudos puños hay que tener para manejar esa masa, yo con una de 1 kilo y me cuesta.
ResponderEliminarBesitosss
Besicos Maria, que entrada tan bonita y doy fé que a ca "Mariquita la del pan " hacen el pan que a mi me gusta más en el mundo. Cuando estamos en Aguilas cada mañana vamos a comprar el pan para comer y los chuscos para la merienda de los crios y cuando nos venimos para aquí me traigo varios panes redondos que congelo en porciones y dosifico para momentos de añoranza....
ResponderEliminarBesicos
Quisca
Un precioso y entrañable homenaje, María. Nada más y nada menos que cuatro generaciones panaderas; hoy en día todo un lujo.
ResponderEliminarCreo que los oficios son todos bonitos, pero además hay otros que son deliciosos y ese es el de los panaderos. Qué gusto poder oler todo el día ese aroma.
Me encantan los panes que has hecho, hoy en día mucho más apreciables, por cuanto comemos un pan malísimo (sobre todo en las grandes urbes y los que llegamos tarde del trabajo, que recalamos como última instancia en los chinos) Quién pudiera probar un pedacito de esos panes.
Buena semana, María
Qué bonita es esta entrada, recordando a tu familia y su panadería, tú ya llevas el arte de hacer pan en la sangre, que bueno ha de estar ese pan que nos traes.
ResponderEliminarUnos abuelos muy guapos.
Besos bonita.
María, veo que haciendo estos panes maravillosos , te han venido infinidad de recuerdos a la mente y todos preciosos, seguro que lo de los zapatos no te gustaba nada, pero ahora lo recuerdas con cariño, cuantos momentos te han venido a la memoria y todos tan bonitos y yo he disfrutado leyendolos. Aparte del pan, me ha encantado la balanza, por favor, no se te ocurra tirarla, eso es un tesoro impagable, es preciosa,muchos besos y feliz semana
ResponderEliminarSofía
milideasmilproyectos.blogspot.com
Queridísima amiga María. Que alegría me da ver tu historia, doy fe de ello que es así.Una panadería de las mejores en Águilas, sin lugar a dudas. Y que alegría ver, aunque solo sea un poquico de la mano de tu madre. Un gran beso para ella y por supuesto para tu padre, de sus amigos Paco y Maite. Y que decir del pan, insuperable. Rompería la pantalla del ordenador para coger un trocico. Bueno un besico para todos y espero poder volver pronto a mi gran pueblo de Águilas.
ResponderEliminarQuerida María, hoy no sé que he disfrutado más, si tu pan o la historia de cuando eras niña.
ResponderEliminarMuchos besos,
Vero
Mi querida María, que entrada tan entrañable...! en algunos momentos, me has hecho recordar cuando entraba en el obrador de la prima de mi mami... Mira que tengos ganas de hacer pan, pero no me atrevo... lo veo un poco complicado... si hasta hay que saber amasar, pero con arte! como se ve en las fotos que lo haces tú! Espero, que el negocio siga por muuchos años! El pan... expectacular! felicita a tu madre de mi parte, pues ves, hasta hay que saber hacer los cortes . Espero que algún dia, me atreva ha hacerlo, pues la experiencia debe ser unica...! Y la balanza, una joya!
ResponderEliminarBesitosss.
Que pasada de pan Maria y una entrada preciosa, muestras en algunas entradas un trocito de tu vida o de tu historia y me encanta, albergas muchisimos sentimientos y desprendes amor por los cuatro costados.
ResponderEliminarUn besazo muy grande preciosa!
paisanica mandame uno ummmmmmmmmmmmmmmm, pero lo que mas me gusta son las manos de tu madre , si pudieran hablar esas manso cuanto trabajo
ResponderEliminarVaya pinta que tiene ese pan relleno de chorizo o de jamón estará fantástico y que bonita la historia de tu familia. Un beso
ResponderEliminarComo se nota que sabes, pero como puedes amasar toda esa masa ¡¡¡.
ResponderEliminarHola María.
ResponderEliminarEstoy muy interesada en hacer pan, pero en todas las recetas que veo me hago un lío tremendo con las levaduras. La levadura prensada y la levadura de panadero es la que se compra en panaderías??? Es la misma que venden en mercadona en los refligerados en cubitos??? Se puede hacer pan con levadura en polvo????
Tengo tantas dudas.... me resuelves las que puedas???
Besicos!!!
si es que lo llevas en los genes Maria!!! Menudos panes te han quedado de 10!!!! un besicooo
ResponderEliminarPreciosa historia y preciosa infancia rodeada del olor a pan recién hecho, un besito
ResponderEliminarMadre mia María!! te han quedado unos panes estupendos, se nota que de casta le viene al galgo, verdad?. Me encantan esas pesas con las que has fotografiado los panes, recuerdo que el horno-tahona, del al lado de mi casa, en el pueblo también las tenía y ahí te pesaban la harina cuando la comprabas, eso son reliquias del pasado, sí señora!!
ResponderEliminarUn besete y Feliz semana Guapa!!
Ah!! que estoy de sorteo, pásate cuando quieras!!
Ay... que bonito leer tu historia, tus recuerdos y tu vida... como me ha encantado, tan bonito como esos panes, madre del señor!! que pinta por dios, y que trabajera amasar 5k. chiquillaaaaa!!!
ResponderEliminarYa sabes lo que me motiva el pan. Me encanta.Así que tu entrada me ha llamado enseguida la atención.
ResponderEliminar¡ Qué panes más preciosos!.
Pero qué fuerte en la cantidad de harina...Yo hago 500 gr de harina, que unida al agua, la masa madre, y la sal, equivale a una hogaza de un kilo de masa.
Pero es que tú, llevando en la sangre la panadería, no podría ser de otra manera...
¿ Me podrías decir que tipo de harina has usado? ¿ O es una mezcla de varias?.
Un beso!
María llevas el pan en al sangre, te sale buenísimo, bsts
ResponderEliminarUna entrada fantástica! Un pan excepcional y una historia muy emotiva! Enhorabuena por el homenaje!
ResponderEliminarUna entrada de lujo, los panes, las báscula y tú. Besos amiga.
ResponderEliminarQuerida María, con tu permiso cogeré la receta. Todo lo cocinas muy bien pero el pan seguro que lo bordas, ya que según nos cuentas en la introducción has crecido con ello. Los panes se ven espectaculares
ResponderEliminarBesitos
Ya sabía yo que mi Desafío te iba a ir como un guante!!
ResponderEliminarGuapa, me gusta mucho tu entrada, tu dedicatoria, tu pan y tu pesa centenaria... ¡¡¡yo también quiero una!! jeje es preciosa!!
En cuánto al pan, se notan las manos expertas... así que sé benevolente con los nuestros de principiantes, jeje
Un besote enorme.
Una entrada super bonita sobre tu familia, me ha encnatado, el pan que decirte seguro que buenisimo y sobre todo para ti facil por la experiencia de verlo hacer todos lso dias...
ResponderEliminarMe ha encantado tanto las fotos con el peso antiguao detras como ver la foto de tus abuelos....
Mi querida amiga que entrada tan entrañable y emotiva, esta hecha con el corazón y así la he leído yo, pones tanto amor en todo lo que haces que no podía salirte mal de ninguna manera, ya te he dicho otras veces que eres la reina de las masas y hoy con este post y estas fotos lo has demostrado con creces. Mi abuela siempre decía que lo que se aprende con baba no se olvida con canas, no quiero llamarte mayor con esto eh! Jeje pero es verdad tu lo mamaste y eso se nota y mucho.
ResponderEliminarDeseo que sigas subiendo recetas como esta de las que se me cae la baba cuando las leo. Besos corazon
Madre mía, me quito el sombreo, que pedazo de panes. Este desafío estaba hecho para ti claro está para que nos contases esta bonita historia familiar y nos mostrases tus destrezas. Besos
ResponderEliminaray, como me ha gustado tu entrada y esas fotos tan bonitas. Me has puesto un nudo en el estómago porque has escrito con el corazón y lo he sentido muy dentro. Ojalá te pudiera dar un beso ahora mismo. Que maravilla esas manos amasando y que panes mas ricooooos!!!!
ResponderEliminarUna entrada muy bonita y con mucho sentimiento. Menuda tradición hay en tu familia. Y tus panes seguro que son una delicia.
ResponderEliminarQue de panes, que ricos!!! Que cantidad de masa, para amasar todo eso necesitas tener un mogollón de fuerza, estoy admirada, de verdad!!
ResponderEliminarBesos!!
Me han encantado, esos panes tan perfectos. Y la entrada muy emitiva. Enhorabuena por este desafío, tiene que haber sido muy especial para tí. Besotes
ResponderEliminarMaría... Ya te lo han dicho todo, solamente me resta añadir que me llegó el olor a pan, me llevaste a mi infancia. A escasos 200 metros de mi casa estaba la panadería de mi pueblo (aún hoy llamamos la casa de la panadería)y por las mañanas de brisa, al levantarnos se nos llenaban todas las estancias de ese olor inconfundible de la masa al cocer...
ResponderEliminarRindes homenaje a los tuyos con esta publicación. Publicación que volará muy alto y, desde su estrella, te llenarán, os llenarán, de bendiciones todos los ausentes. Además con la colaboración de unas manos que tantos y tantos panes han cortado, amasado y horneado, el resultado tiene que ser el mejor. Miles de besos para tus padres, se les llenará el corazón de orgullo con tus palabras. Palabras que llegan María, que llegan y calan en los corazones. Al menos en el mío.
Unos panes especiales que habrá que hacer, aunque no queden ni parecidos a los tuyos. Gracias por todo, por tu amistad, por tu cariño, por estar siempre ahí. Besinos, tu amiga de Asturias.
Maria un post de lujo el de hoy, un paso a paso y explicación geniales y un resultado magnífico...me voy encantada después de leer tu aportación princesa
ResponderEliminarBesotes por mil
Se nota que lo llevas en los genes. Estan perfectos!!besos!
ResponderEliminarEmocionante y emotiva entrada en la que has puesto el corazón, tan así es que los panes están espectaculares.
ResponderEliminargracias por compartir momentos tan bonitos de tu vida.
Mil besitos
Hola Maria que entrada mas bonita me ha encantado la balanza ya me fije en ella en la primera foto es preciosa debe ser que las cosas antiguas me encantan me encanta lo que cuantas y
ResponderEliminarcomo lo cuentas con tanto cariño y que decirte del pa, me parece maravilloso que rico madre mia con las ganas que tengo de hacer pan me encanta
!!!! un besin !!!!
el toque de belen
Que bonito....el pan, tus recuerdos, lo que significa a veces una profesión, es muy bonito todo lo que dices de tu infancia, yo me crié al lado también de una panadería y tengo buenos recuerdos de ella, porque es un trabajo muy bonito y sacrificado, el pan...ni te cuento, de escándalo, te lo copiaré aunque por supuesto tendré que reducir las cantidades, me veo incapaz de mover una masa tan grande....y la balanza....creo que tengo una igualita, mi suegro tenía una tienda también mas o menos por esas fechas, y el peso ha llegado hasta nuestros días...pero en su caso, pesaba judías, lentejas y harinas....
ResponderEliminarUn besito...oye, impresionante el viaje que has hecho....
Holaa, una de las cosas que más me gusta hacer culinariamente hablando es el pan, el olor que sale de la cocina, el sobeteo de la masa, todo en sí , me vuelve loca. Tu lo llevas en las venas, con lo cual no me extraña que te haya quedado así de bien, tiene una pinta estupenda y la balanza es la ostiaaaaaajeje.
ResponderEliminarBesos
5 kg de harina ?? madre mia !!!! Eso siii PEDAZO PANES dios santo !!!
ResponderEliminarIncreible !!!Que bonita historia la tuya !! Ha tenido que ser maravillosa esa experiencia !!
Besote
Hola Maria! Por fin he vuelto!! Ya estoy aqui y ahora (espero) quedarme 100% con vosotros :) Como estáis cielo? Espero que el nuevo año esté yendo fenomenal :) Te he echado muchísimo en falta! A ti y tus comentarios :) Pero bueno, ya estoy aqui si o si!!
ResponderEliminarY qué decirte de la entrada, me ha encantado, me ha parecido una entrada preciosa y emotiva :) Eres encantadora y especial! Y el pan.. tiene una pinta estupenda! Me encantaría probar un cachito :)
Un besito enorme!
Muchísimas felicidades por este lujo de receta Maria. Yo también me crié puerta con puerta de una panadería y para mi eran como familia, por lo que desde que nací, ví cómo a primeras horas de la mañana, empezaba el ajetreo de las harinas y los hornos. El olor, era algo incomparable, y me identifico perfectamente, cuando cuantas cómo se llenaban los zapatos de harina, cada vez que se entraba en la tahona. Por desgracia, me vine a vivir a Gijón con 11 añitos, y perdí la oportunidad de aprender la técnica del pan en directo, pero me encanta amasar y hacer panes y en casa, siempre hay pan casero.
ResponderEliminarLa historia que nos cuentas, es de lo más entrañable, y esa balanza, símbolo de tantos recuerdos, tiene que ser una auténtica joya para tí y tu familia.
El pan, como no podía ser de otra forma, es un espectáculo, y tener el lujo de contar con el arte y la ayuda de tu madre, es una suerte que pocos tienen.
Disfruta muchísimo de todo ello, y nosotr@s disfrutaremos de tus experiencias.
Un besín.
Como me gusta venir a visitarte pesiosa me tienes enganxada a cada post que haces .
ResponderEliminarQue rewapooos los abuelos y que bonito contar con esos recuerdos lo mejor es pider ir a la panaderia y que se conserve todo igual ahora los hornos practicamente todos son electricos y el pan no es igual.
Mi abuela amasaba el pan y lo cocia en un horno que aun existe pero al llevar años abandonada la casa no esta en vondiciones de usarse porque no creas que no me dan ganas de ir hacer alli el pan para toda la semana.
Tomo nota de tu receta pues nunca se sabe si podre hacer pan en un horno que no sea el de mi cocina.
Te ha quexado de lujo ,que mano tiene tu madre le ha exo unos cortes fantasticos.
La bascula es una preciosidad yo recuerdo una parecida que seguro es nas moderna en la panaderia que habia aqui de toda la vida en la cual aun calientan el horno con leña para hacer el pan.
La produccion es con el pan por encargo porque las personas que la regentan ya son mayores y solo trabaja en ella su hijo.
Bicos mil potita miaaaa.
Gracias María por una entrada tan, tan bonita. Yo soy una apasionada del pan y de su mundo, sobre todo de la vida de panaderos tradicionales. Mi madre me cuenta cosas que recuerda de su infancia con los panaderos del pueblo y me has hecho pensar en ello a través de tus bonitas palabras; mil gracias por compartir esas memorias! Debió ser una maravilla crecer entre masas y panes, aunque fueran épocas humildes :).
ResponderEliminarY bueno, qué panazos! Impresionantes, qué aspecto, qué miga! Fantásticos.
Un abrazo
Un pan espectacular, vaya corte tan impresionante, Nunca he preparado pan le tengo un poco de respeto a esa masa.Como dice el refrán, de tal palo tal astilla.bs
ResponderEliminarEl olor de pan recién hecho me recuerda a los veranos que pasaba en un pueblecito de Córdoba, donde hacían el pan, pan, de pueblo sí señor.
ResponderEliminarTiene muy buena pinta esta receta aunque aún no me he atrevido ha hacer algo parecido. Algún día me animaré.
http://lascositasaladas.blogspot.com
Que bonito María!! Las manos de tu madre son geniales, que arte!!
ResponderEliminarLos panes se ven tremendos, ya quisiera yo tener tu habilidad!!!
Un besote mi niña!!!
María, estas son las entradas que me gusta leer, y porque no guardar. Me gustan las historias familiares. Casi, casi he olido ese pan al leerte. Me imagino el ambiente que describes, cierro los ojos y recuerdo la tahona que había al lado de mi casa y a la que iba a diario con mi madre para comprar el pan. Esa harina en el mostrador de mármol, y ese cesto con colines que mi madre me compraba sólo de vez en cuando.
ResponderEliminarBss
Elena
No hay nada mejor que crear su pan artesanal en casa. Muy buena receta. Un besazo desde París.
ResponderEliminarQué buena entrada y qué ricos panes, me recuerda mucho a mi abuela que también era una gran panadera y pastelera aunque no tenía panadería.Un besito
ResponderEliminarAyyyy que envidia de pan y recuerdos, yo de pequeña iba a la confitería de mi tía por la trastienda a ver todo lo que se cocía por allí y la verdad que es una maravilla!!!
ResponderEliminarBesos
MARIA, a estos panes, le pongas lo que les pongas, hasta simplemente solo, o con aceite, estan divinos!!!
ResponderEliminarBESOS NIÑA MUCHOS BESITOS :)
Por cierto; que ABUELOS mas distinguidos, y que familia la tuya, no me extraña que hayas salido tan buena gente; un dia de estos me persono en tu casa y te "robo" la balanza, aiss que tiempos aquellos!!!
ResponderEliminarUN ABRAZO DE CORAZÓN MI QUERIDA MARÍA :)
Un pan espectacular, viniendo de quién viene, no podía ser menos...y una entrada realmente preciosa, estos negocios son los que realmente merecen la pena...
ResponderEliminarUn besito
María siempre que te visito me llevo un buen sabor de boca, me encata como escribes, como transmites el cariño y el respeto por la familia, adoro eso, y que decirte de ese pan, dios mío, todo un lujo al paladar, un besito grande de la dulce Ali
ResponderEliminarDiosssssss que panes... como se nota tu crianza entre harinas jamia!!!
ResponderEliminarNo se ni como he llegado hasta aquí, seguro detrás de toda la información posible acerca del amasado y horneado de pan. Y es que este año quiero que sea mi año del pan y las masas, una de mis muchas asignaturas pendientes.
Me quedo por aquí, por si aprendo algo contigo!!!
Saluditosssssss
Maria, amiga mia, te deje un comentario en esta entrada y no se si lo busque mal o no encuentro,,,no pasa nada,,te lo dejo de nuevo.
ResponderEliminarDecirte que vengo a probar un poquillo de pan con una rebanadica de mojama o hueva, que me es indiferente,,con su aceitico o con aceite, tomatillo y bacalao,,como decia una amiga mia, se me da igual. Se que el acompañamiento es lo de menos.
Si quieres, vete a mi blog y la penultima entrada ,,,ahí estas tu con mencion especial...corre chiquilla.
Un abrazo muy fuerteeeeee ...en espera de ....
María, me ha encantado la entrada tan entrañable que le has dedicado a tus antepasados y a su noble oficio. Merecido sin duda este pequeño homenaje que le has hecho, a un trabajo tan duro aunque muy gratificante. Me ha gustado mucho leer tus recuerdos de cuando eras pequeña, y como te quedabas embobada mirando a tus padres trabajar. Como ya has leído en mi entrada mi madre también tenía ascendencia panadera y tiene sentimientos muy parecidos, sólo que yo no he tenido la suerte de poder vivirlo. A ella le voy a recomendar leer tu entrada que estoy segura le va a gustar mucho. Y como no decirte que has preparado un pan muy a la altura de lo que nos cuentas, se nota que no eres novata en esto y que has visto como se preparan las masas y demás. Muy bonito también el detalle de incorporar la balanza en tus fotos. Un besazo guapetona.
ResponderEliminarRealmente es una entrada preciosa, por toda la historisa que lleva.... Me encantan tus panes
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Maria, hace poco quele perdi el miedo a la masa del pan y ahora disfruto como una loca preparando pan casero. Ya no tengo pan comprado en el congelador y este pan que nos has enseñado es fantastico.
ResponderEliminarHola Maria, hace poco quele perdi el miedo a la masa del pan y ahora disfruto como una loca preparando pan casero. Ya no tengo pan comprado en el congelador y este pan que nos has enseñado es fantastico.
ResponderEliminarpreciosa entrada, desde luego el pan mas profesional imposible!!
ResponderEliminarEstaba yo pensando que no había visto ninguna entrada tuya hacía días y me extrañaba, es que tengo que tener un fallo porque no eres la única que no me llegan las entradas nuevas.
ResponderEliminarEsta entrada me ha encantado, madre mía, la de panes que habrás visto hacer durante toda tu vida, y esos olores, qué perdición. Bonita historia y saber que sigue el mismo negocio en la familia, qué lujazo, cuatro generaciones son muchas. Me ha encantado ver la mano de tu madre haciendo los cortes al pan, y me ha gustado saber que a tu abuela la llamaban mariquita, cuantas cosas has compartido hoy aquí.
Me ha llamado la atención la poca cantidad de levadura para la gran cantidad de harina, si ya lo dicen los panaderos, que abusamos de la levadura.
Una maravilla de panes mi querida María, tú si que tienes unas manos que dan envidia.
Besotes muy gordos amiga.
Mi María, bonita!!
ResponderEliminarDisculpa la tardanza, pero ya sabes que nunca te fallo, y no sabes lo mucho que me ha conmovido ésta entrada, es preciosa, realmente preciosa, cada día me sorprende más ese ángel tan grande que eres, tan lleno de amor de cosas que verdaderamente encantan!!
Cómo te quiero María y aunque estés tan lejos, siempre te siento tan cerca.
Qué hermosa historia, ya te lo he dicho antes, pero aquellos recuerdos de tu infancia en la panadería, me llenan de alegría, debió ser algo maravilloso.
El pan te quedó espectacular, perfecto, y la balanza es tan hermosa!!
Estoy segura que tu familia está muy orgullosa de tí!!
Un beso grande grande!!
Qué buena pinta por favor!!!! Se ve un pan con mucha sustancia!! Pedazo de masa es enorme, para eso hay que tener unos buenos brazos! Debo practicar mucho! :)
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir la receta
un beso compi de desafío !:)
Qué maravilla de pan, esto es jugar con ventaja, verdad??. Todo maestría y has compartido parte de tu vida con estos panes.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Esto si que se ve pan casero del casero.
ResponderEliminarUn bonito homenaje a tus abuelos y familia. Antes de empezar a leer al ver la foto pensé,que bonito pan parece de profesional y no me equivocaba lo llevas en la sangre.
ResponderEliminarBstes
Una entrada preciosa, con unas palabras muy bonitas hacia tu familia....y qué decir de ese pan hecho a la manera más tradicional que se puede pedir.... y no podía ser nada más y nada menos que tú, esas manos expertas... Enhorabuena por tu pan....Besitos
ResponderEliminarGuapa cuanta tradición y que bonita entrada. Gracias por compartirla¡¡¡ Familia de panaderos¡¡ si no se puede pedir más¡ Magníficos los panes pero más que hayas compartido parte de la historia. Un beso muy grande, Teresa
ResponderEliminarFelicidades por esta preciosa entrada dedicada con cariño a tu familia panadera. La verdad es que se nota la herencia que llevas y el arte que tienes a la hora de hacer pan.
ResponderEliminarMe encantan estos panes con ese aspecto tan tan casero y tan rico. Me imagino una rebanada tostada y con un buen aceite de oliva, inmejorable.
Un beso grande amiga,
María estoy emocionada con esta entrada. Desde la primera letra hasta el último punto. Me has trasladado a la Artesa, con tu madre greñando el pan, tu padre manejando la pala y una niña dando vueltas a su alrederor...
ResponderEliminarEso si, tengo que tomar una clase de panadería castiza, con su lenguaje totalmente nuevo para mi. Que envidia me ha dado todo. Hacer pan es uno de los mayores "milagros" de la humanidad¡¡¡
Creo que un día de estos me voy a presentar en tu pueblo para visitar el horno y tener una larga charla contigo y con tu madre.
Enhorabuena por ese tesoro que guardas en tu memoria. Bss de todo corazón a las dos.
Virginia "sweet and sour"
HOla María!!!! Es una entrada preciosa, rindiendo homenaje a tus abuelos y mostrando con orgullo la balanza. Es un lujo haberte criado en medio de masas y panes. Y qué decirte de la receta en sí? pues sencillamente espectacular. Un besico murcianico!!!!
ResponderEliminarPreciosa publicación, me ha encantado.... da gusto leerte!
ResponderEliminarBesos
que rico .yo siempre dije que el.pan mas rico.de aguilas el de. la mariquita la del pan. y la historia preciosa mi.familia tambien somos ya 5 generaciones de cocineros y mi abulelo antonio que era ferrobiario en un tiempo tambien fue.panadero.
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